lunes, 26 de octubre de 2009

XXVI Concurso de queso de pastor del País Vasco y Navarra

Hermanos Aranburu, ganadores del concurso © Xavier Landa/gourmet-image

El pasado sábado se celebró en la Plaza del Castillo de Pamplona el XXVI Concurso de queso de pastor del País Vasco y Navarra. Nuestro jefe de Fotografía, Xavier Landa, formó parte del jurado. El concurso no contó con al participación de los pastores de Álava, en protesta por la gestión del lobo que está haciendo su diputación.
Los hermanos Aramburu, del Caserío Ondramuino, de Idiazabal, Guipúzcoa, presentaron un queso ahumado y se alzaron con el primer premio, que recibieron de manos de la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina, catedrática en nutrición y bromatología y enamorada del mundo del queso. Hace unos meses obtuvieron un tercer Premio de la Cámara de Comercio de Roma a los mejores quesos de oveja hechos fuera de Italia.
Los quesos presentados, tanto ahumados como naturales, tenían una curación mínima de 3 meses y estaban elaborados por los propios pastores a partir de leche cruda de oveja latxa. Participaban los 10 primeros clasificados en los concursos provinciales de Alava, Guipuzcoa, Vizcaya y Navarra.
"Hay que estar un poco loco para hacerse pastor", aseguraba ayer J. Aranburu Elkarte. Pese a sus declaraciones, los tres hermanos Aranburu llevan ya 30 años elaborando quesos, una profesión que heredaron de su abuelo.
Además de asistir al concurso, la gente que se acercó hasta la plaza del Castillo tuvo la oportunidad de degustar diferentes quesos. Mientras el jurado comenzaba con la cata de los 27 que luchaban por distinguirse como el más exquisito, los cientos de personas que acudieron al evento paseaban entre los puestos probando las diferentes muestras y comprando.

1 comentario:

  1. Hola pareja,
    Ya nos han llegado vuestros saludos desde el jurado de premios de los quesos, del cocinero del Alhambra con el que compartiste juicio.. como nos unen las buenas cosas!!el queso bien hecho, las gastronomía cuidada, las buenas imagenes que captan vuestas cámaras y el buen hacer de la gente que sabe apreciarlo. Un abrazo, Marina

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